Se conmemoró ayer el Día Mundial de la Lucha Contra la Diabetes, una jornada destinada a la prevención, educando a la población y promoviendo hábitos saludables. En Mendoza se estima que 180 mil personas tienen esta enfermedad, pero sólo la mitad lo sabe. Entre los grupos de riesgo se destacan los adultos con obesidad, tabaquismo y sedentarismo, y las mujeres que han tenido hijos de más de 4,5 kilos. Los especialistas aseguran que ya es una verdadera pandemia. Si bien no hay datos locales, por aplicación de estadísticas realizadas en Latinoamérica, estiman que en la provincia hay unas “180 mil personas con diabetes, de las cuales, la mitad no lo sabe”, explicó Estela Charparin, titular del Programa Provincial de Diabetes.

“Inclusive, según un estudio realizado en Mendoza en el 2009, se ha registrado en los últimos años un aumento en el número de casos de diabetes del tipo 2, relacionados con la obesidad”, precisó Charparin. Por esta razón, es fundamental la prevención, en especial si se tiene en cuenta cuáles son los factores de riesgo más importantes para el desarrollo de la patología. “Entre ellos, se destacan la predisposición genética, los malos hábitos alimenticios, la hipertensión y el sedentarismo”, explicó Guillermo Marcucci, presidente del Capítulo Mendoza de la Sociedad Argentina de Diabetes (SAD).

También es importante el factor de la edad de la persona, ya que a los 50 años hay mayor predisposición a su aparición. “No obstante, en los últimos años se han registrado, aunque excepcionalmente, casos en niños en edad escolar”, manifestó la titular del Programa provincial. Las mujeres que han tenido hijos que al nacer pesaron más de 4,5 kilos se suman al grupo de riesgo. En estos casos, se les haya diagnosticado o no, se presume que tuvieron diabetes gestacional.

Justamente, para evitar el desarrollo de la enfermedad, es que los especialistas buscan concientizar a la población. “Se trata de educar a la gente para que evite los factores de riesgo, o sea, que lleve una alimentación adecuada, haga ejercicio físico, no fume y se realice los controles médicos respectivos”, precisó Gustavo Tanús, director de Programas Preventivos de Mendoza. “Asimismo, es importante tener en cuenta que ese grupo proclive a la patología es dos veces y media más que el de los diagnosticados, como bien se encargó de aclarar Marcucci.

Mundialmente, la diabetes afectó en el 2011 a 366 millones de personas, y se estima que, si no se toman las medidas adecuadas para detener su avance, en el 2030 alcanzará a 552 millones. Asimismo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) informó recientemente que ocho de cada 10 enfermos de diabetes viven en países desarrollados, lo que deja en evidencia que no es una patología relacionada a factores sociales ni económicos.

La celebración del Día Mundial de la Lucha Contra la Diabetes corresponde con la jornada en la que nació Frederick Banting, quien, junto a Charles Best, concibieron la idea que permitió el descubrimiento de la insulina en 1922. Como parte de la campaña, muchos edificios de la provincia lucirán vertidos de azul, el color que identifica a la lucha por la prevención de esta patología. Entre ellos, la fuente de la plaza Independencia y los Caballitos de Marly, en Ciudad; y el teatro Plaza y el edificio comunal en Godoy Cruz.

TRATAMIENTO. “La diabetes mellitus, término científico con el que se denomina a la patología, es una enfermedad crónica no transmisible. Sin embargo, hoy es considerada una verdadera pandemia, que no distingue razas, edades ni clases sociales”, detalló el titular local de la SAD. La patología abarca tres tipos, reconocidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El primero es el denominado del tipo 1, que tiene origen autoinmune y representa 10% de los casos. Por otro lado, está la Diabetes de tipo 2, generada por factores como la obesidad y la edad. Finalmente, el tercer tipo es la gestacional, que se presenta en las mujeres durante los nueve meses del embarazo.

Como toda patología crónica, no se cura pero sí se puede controlar su avance y lograr una calidad de vida mejor si se sigue el tratamiento adecuado. Actualmente, los especialistas utilizan el método denominado empoderamiento, que implica “delegar tareas al enfermo para que participe en forma activa en su recuperación”, aseveró Marcucci. Así, el objetivo es educar al paciente para que sepa cómo es la patología y pueda reconocer las complicaciones que puede enfrentar y entienda cómo reaccionar. Los cambios de hábitos sugeridos para prevenir la aparición de la diabetes son los mismos que debe seguir el paciente diagnosticado. No obstante, el tratamiento abarca el uso de medicación y de insulina, vital para los diabéticos del tipo 1, y necesaria para quienes tienen la del tipo 2.